La autoestima

"La autoestima es el razonamiento de que soy apropiado para la vida, soy competente y me reconozco el derecho a la felicidad".

Branden Nathaniel

¿Quieres alcanzar una buena autoestima?

Sin importar tu situación es importante comprender que la "autoestima" es producto del trabajo físico y mental que lleves contigo mismo. 

 

Entre más empeño, amor, concentración y pensamientos positivos imprimas en tus acciones, éstas no solo mejorarán, si no llenarán tu vida de satisfacciones y confianza.

 

Para comenzar a trabajar en tu autoestima te dejamos estos  consejos:

 

Una baja autoestima tiende a manifestarse de diferentes formas:

  • Necesidad insaciable de amor y de obtener la aprobación de los demás
  • Eventos de ansiedad y depresión crónicas
  • Profesión y trabajo insatisfactorio
  • Mala organización y bajo rendimiento
  • Sentirse incapaz de obtener cariño de los demás
  • Comer y vivir destructivamente
  • Metas y sueños que no se cumplen
  • Insatisfacción en tu relación amorosa

Las razones de fondo de éstas situaciones normalmente se atribuyen  a dos principales causas:

 

1. Falta de confianza para elegir y tomar decisiones sobre el rumbo de tu vida.

 

2. Carencia de un reconocimiento propio a tu derecho de ser feliz. 

 


Seis consejos para lograr una autoestima sana

1.Vive consciente

Si no aportamos un adecuado nivel de esfuerzo y concentración a nuestras actividades, el precio inevitable es un mermado sentido de eficacia personal y de respeto a uno mismo.

 

Nuestra mente es nuestro instrumento básico de supervivencia, si se traiciona, se resiente la autoestima. La forma más simple de esta traición es la evasión de los hechos que nos son difíciles o nos causan perplejidad, duda, indecisión. Por ejemplo:

 

“Sé que no estoy trabajando lo mejor que puedo, pero para lo que me pagan y para lo que recibo de incentivos”. 

 

"Sé que mis hijos sufren por recibir tan poco de mí y sé que les causo daño y resentimiento, pero algún día, de algún modo, cambiaré”

2. Acéptate

Aceptarte a ti mismo tiene tres niveles de significación:

  • Significa estar de tu lado: ¡No te pelees contigo mismo! Exprésate y experimenta sin miedo, ni juicios, tus pensamientos, sentimientos, emociones y actos. Acepta la realidad de tu sentir y elige como enfrentarlo.
  • La aceptación de sí mismo conlleva la idea de compasión, de ser tu mejor amigo. La culpa, el arrepentimiento, o la verguenza, no cambiarán tus actos. Toma conciencia, acepta tu error, perdónate, y toma la responsabilidad de no volver a cometerlo.
  • Comprométete contigo mismo y con tus necesidades. Toma el reto de transformar tus sueños en objetivos alcanzables. 
     

3. Vivir con propósito

Vivir con propósito es utilizar nuestras facultades para la consecución de las metas que hemos elegido.  (La meta de estudiar, crear una familia, organizar nuestros archivos, empezar un negocio nuevo, hacer ejercicio, dedicar tiempo a nuestros hijos, pareja, amigos, padres).

 

Son nuestras metas las que nos impulsan, las que nos exigen aplicar nuestras facultades, las que vigorizan nuestra vida. Vivir con un propósito no es más que conocer tus habilidades y saber como utilizarlas para cumplir tus objetivos.

4. Práctica de la autoafirmación

La autoafirmación significa respetar tus deseos, necesidades y valores sin someterlos a la aceptación de otros. Es decir dejar de buscar el reconocimiento de tus padres, amigos o entorno. 

 

Autoafirmarte es vivir de forma auténtica, hablar y actuar desde tus convicciones y sentimientos más íntimos. Evitar confinarte a ti mismo a un perpetuo segundo plano en el que todo lo que eres permanece oculto o frustrado para evitar el enfrentamiento con alguién cuyos valores son diferentes, o para complacer, o para manipular a alguién o simplemente para mantener una buena relación. 

 

 

 


5. Sé responsable

Ser competente y digno viene de la mano con la necesidad de experimentar control sobre tu vida.

 

Hacerte cargo de las consecuencias de tus emociones, tus actos, tu trabajo, tu tiempo,  tu felicidad, tus valores, es la única forma de adquirir el poder de cambiarlos y establecer planes de acción sobre lo que no deseas.

 

 

6. Integridad personal

La integridad va más allá de la concordancia entre las palabras y el comportamiento, requiere de una conciencia y aceptación de tus emociones para encauzarlos a tu voluntad. La integridad es la armonía en la que se manifiestan tus convicciones, normas, creencias y actos.